17 julio 2012

QUINO

Quino es un dibujante argentino (Mendoza, 1932). Hijo de inmigrantes españoles, la pérdida de sus padres durante su infancia hizo de él un niño solitario y taciturno, aislamiento que favoreció su dedicación al dibujo desde pequeño, guiado por su tío Joaquín Tejón, dibujante profesional.
Estudió en 1a. Escuela de Bellas Artes de la Universidad de Cuyo y, a los dieciocho años, se marchó a Buenos Aires a probar suerte con sus dibujos. Este primer viaje resultó infructuoso, por lo que, al concluir el servicio militar, volvió a intentarlo, aunque esta segunda vez lo hizo como dibujante publicitario y como tal trabajó varios años hasta que en 1962 el semanario Primera Plana aceptó publicar Mafalda como tira fija. Muy pronto, ese mundo infantil compuesto por arquetipos adultos que reflejaba a la clase media argentina se hizo tan famoso, que en 1965 empezó a publicarse diariamente en el periódico El Mundo para deleite de sus lectores.
En 1968 Mafalda llegó a Europa, primero a Italia y luego a España; donde su éxito fue casi tan rotundo como en Buenos Aires; posteriormente se tradujo a varios idiomas y ganó popularidad en otros países. No obstante, en 1972 es decir a diez años del nacimiento del personaje su autor decidió no volver a dibujarlo, pues hasta entonces había vivido presionado por el ritmo que le imponían las tiras diarias.
A partir de 1973, en que se instaló con su esposa en Milán, publicó varios libros de historietas humorísticas entre los que destaca la serie Mundo Quino, pero nunca alcanzaron la repercusión del legendario personaje y los de su entorno, que, a treinta años de su nacimiento y a más de veinte años de su desaparición, se repiten en pósters, juguetes, postales, camisetas y en todo objeto susceptible de estampación.
En 1990 se acogió a la doble nacionalidad y adoptó la española, pero aunque residió algún tiempo en Madrid, regresó finalmente a Buenos Aires. En 1992 organizó una magna exposición en Madrid en la que exhibió reproducciones tridimensionales de sus personajes gráficos.


Cronología:
1932: Nace en Mendoza, Argentina, el 17 de Julio. Es el menor de tres hermanos.
1935: Quino descubre lo que será la pasión de su vida cuando su tío Joaquín (Dibujante publicitario) les entretiene una noche con sus dibujos.
1945: Fallece su Madre. Ese mismo año se inscribe en la Escuela de Bellas Artes.
1948: Fallece su Padre. Abandona la Escuela de Bellas Artes por que quiere dedicarse al dibujo humorístico.
1950: Dibuja su primera historieta para publicidad.
1951: Sufre su primer revés al ir a Buenos Aires y no vender sus chistes en revistas y diarios.
1954: Logra por fín que le acepten su primera pagina de chistes sin palabras en el semanario 'ESTO ES'.
1955-1959: Colabora con páginas de Humor en numerosas publicaciones.
1960: Teniendo ya una buena colocación profesional como colaborador de varias publicaciones se casa con Alicia Colombo su compañera para toda la vida.
1962: Hace su primera exposición en una libreria de Buenos Aires.
1963: Este es un año fundamental en la vida del autor. Publica su primer libro de recopilación de chistes gráficos 'Mundo Quino' y crea la historieta MAFALDA para una agencia de publicidad que no la utiliza.
1964: El 29 de Septiembre MAFALDA ve la luz en el semanario 'PRIMERA PLANA'.
1965: El diario 'EL MUNDO' empieza a publicar la tira de MAFALDA.
1966: Primera recopilación de tiras de MAFALDA en un libro. La edición se agota en dos días.
1967: A final de año se interrumpe la tira de MAFALDA por la desaparición de 'EL MUNDO'. Quino por su parte sigue haciendo la pagina de chistes gráficos que ha estado haciendo durante años y seguirá con ella hasta hoy.
1968: Se reanuda la publicación en el semanario 'SIETE DIAS'. MAFALDA tras estar siendo publicada en algunos otros países de Iberoamérica aparece por primera vez en Europa en una recopilación de textos y humor gráfico realizada en Italia.
1969: 'MAFALDA LA CONTESTATARIA' primer libro Europeo dedicado a Mafalda. Este libro publicado en Italia cuenta con una presentación de Umberto Eco.
1970: A partir de este año Editorial Lumen comienza a editar los libros de MAFALDA, que continuan en el mercado hasta el día de hoy.
1971: El semanario 'EL TRIUNFO' de Madrid empieza a publicar sus chistes gráficos. MAFALDA se extiende por toda Europa.
1972: Tras haber firmado contratos de merchandising para evitar especulaciones con el personaje, Quino firma un contrato para una serie animada de MAFALDA dirigida por Catu. Además publica 'A mi no me Grite', Editorial siglo XXI Argentina. El exito de Mafalda en todo el mundo, desborda a Quino.
1973: Se empiezan a difundir los dibujos animados. El 25 de julio Quino entrega las 4 ultimas tiras y hace que MAFALDA y sus amigos se despidan. Se publica su tercer libro sin MAFALDA 'Yo que Usted...', Editorial siglo XXI Argentina.
1974: Se publica 'Diez Años con MAFALDA'. 1976: Quino se traslada a vivir a Milan. Se publica 'Bien, Gracias. ¿Y Usted?.'.
1977: Realiza a petición de UNICEF la 'Declaración de los Derechos del Niño'. Se publica 'Hombres de Bolsillo'.
1978: Quino recibe el Trofeo Palma de Oro del Salon Internacional del Humorismo de Bordighera.
1979: Con permiso de Quino Glenat empieza a editar las tiras de MAFALDA coloreadas. Se publica 'Gente en su Sitio'.
1981: En Buenos Aires se estrena un largometraje de MAFALDA montaje de cortos hechos para la television.
1982: El Salon Internacional de Humorismo de Montreal lo nombra 'Cartoonist del Año'. Se publica 'Ni arte, Ni parte'.
1983: Realiza dibujos de MAFALDA para una campaña de odontólogos argentinos sobre higiene bucal. Se publica 'Déjenme Inventar'.
1985: Dibujos para propaganda de algunos programas de nutrición, sanidad y cultura del gobierno Argentino. Se publica 'Quinoterapia'. Primeros cortometrajes que se producen y realizan en Cuba sobre páginas de humor de Quino: 'Quinoscopio'.
1987: Se publica 'Si, Cariño...'.
1988: Su ciudad natal, Mendoza lo distingue con el titulo de 'Ciudadano Ilustre como Maestro del Humor, la Sensibilidad y la Justicia de Proyección Nacional e Internacional'. Dibuja un cartel para el Ministerio de Relaciones Exteriores Argentino conmemorando los Derechos Humanos y los cinco años de democracia en Argentina.
1989: En el 25 aniversario de MAFALDA se publica 'Mafalda Inédita'. Se publica 'Potentes, prepotentes e impotentes'.
1991: Se publica 'Humano se nace'.
1992: Se organiza en Madrid la exposición 'El Mundo de Mafalda'. Se publica 'Todo Mafalda'.
1993: 1ª edición de 'Toda MAFALDA' Ed. de la Flor. D.G. Producciones, S.A. en colaboración con TVE produce 104 episodios de la Historieta Mafalda realizados por Juan Padrón en el ICAIC, cortometrajes que no han sido comercializados en la televisión argentina. Se publica '¡Yo no fui!', Ed de la flor.
1994: Se celebran en Milán los 30 años de Mafalda con una reunión en el Circolo della Stampa con la presencia de Umberto Eco, Marcello Bernardi, Fulvia Serra, directora de la revista LInus y Román Gubern, presidente del Instituto Cervantes de Roma.
1995: Se inicia la publicación de páginas de Humor de Quino en El País Semanal, dominical del diario el País en España.
1996: Se publica en Argentina 'Cuentecillos y otras alteraciones' de Jorge Timossi con ilustraciones de Felipe hechas por Quino. Se publica '¡Que mala es la gente!'.
   
1997: Recibe un curioso premio: "Placa de Plata" otorgada por la Asociación Madrileña de Empresarios de Restaurantes y Cafeterías, por haber contribuido con sus manifestaciones gráficas al prestigio y la difusión gastronómica. También se le otorga el premio de la Asociación Profesional de Ilustradores de Madrid.
1998: Ediciones De La Flor, reedita el primer libro de Quino, "Mundo Quino", con prólogo del autor. Es distinguido por la Secretaría de Cultura del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires como Maestro de Arte en reconocimiento de su labor. Recibe el Premio B'nai B'rith Derechos Humanos, que esa organización otorga anualmente a personas que se han destacado en la promoción y defensa de esos derechos. Publica su página web.
1999: En abril, Ediciones de la Flor reedita el libro "A mí no me grite". La Librería Internacional invita a Quino a San José, Costa Rica, con el auspicio del diario "La Nación".
2000: El Instituto Cubano del libro expone la muestra El Mundo de Quino en el Centro Wilfredo Lam, subsede de la Novena Feria Internacional del Libro de La Habana. Litexa Boliviana S.A. invita a Quino a La Paz, Bolivia, con motivo de la Feria del Libro, con el auspicio de Lloyd Aéreo Boliviano y la Alcaldía de La Paz. En esta oportunidad, la relación establecida con el público lo llevó a comprometerse a asistir a la Feria del Libro.
2001: Durante julio y agosto realiza una muestra itinerante de Humor en Bolivia. A su vez, en Grecia, con motivo del 5º Festival Internacional del Humor, Quino expone una muestra de sus dibujos y de algunas tiras de Mafalda, con el auspicio del Ministerio de Cultura de Grecia y la Unesco. En Octubre es invitado al Salón Internacional del Cómic de Gijón. Con motivo de la muestra Iberoamericana de Humor Gráfico, la Universidad de Alcalá de Henares le nombra Catedrático Honorífico del Humor. En noviembre, Ediciones Glénat y Hachette Canadá invitan a Quino al 23º Salon du livre de Montreal. En diciembre, Quino fue galardonado con el prestigioso premio Quevedos de Humor Gráfico, por los Ministerios de Educación y Cultura y Asuntos Exteriores de España.
2002: en Septiembre es invitado a exponer su obra de humor gráfico y Mafalda en el "21ème Salon Interncional de la Caricature, du Dessin de Presse et d'Humour" de Saint Just le Marte. En Noviembre el IILA (Instituto Italo-Latino Americano) y la Embajada de la República Argentina organizan en Roma una exposición de Quino "Il Padre di Mafalda ha altri figli" en la Scuderie del Palazzo Santacroce.
2003: Realiza una exposición de sus trabajos y una charla en la ciudad de Bahía Blanca, Argentina.
Inaugura la Feria Internacional del Libro de Guayaquil, Ecuador. En septiembre realiza una exposición de su obra en Biarritz, Francia, con motivo del festival de la CITA 2003. La Universidad de Guadalajara le otorga el premio-homenaje "La Catrina", y se realiza una exposición de su obra.
2004: Inaugura en Milán (Italia) la exposición “De viaje con Mafalda” conmemorando los 40 años de la primera publicación del personaje en Argentina. En julio, Ediciones de la Flor publica su nuevo libro: ¡Qué presente impresentable! En agosto inaugura en Buenos Aires la exposición “Quino, 50 años”, celebrando los 50 años de la publicación de su primer dibujo humorístico en la revista “Esto Es”. La exposición se traslada luego a Córdoba y Mar del Plata. En Noviembre Éditions Glénat (Francia) organiza en París, un homenaje a Quino acompañado de una exposición de dibujos de sus colegas franceses que agasajan a Mafalda, y lanza el libro Un présent impresentable. El 17 de noviembre es declarado Ciudadano Ilustre de Buenos Aires.    
2005: La exposición “De viaje con Mafalda” se presenta en Roma, Nápoles, Zagarolo (Roma), Voghera (Pavía), Jesolo (Venecia), Bologna y Barcelona. La exposición “Quino 50 Años” continúa su itinerancia por Argentina presentándose en Rosario, Casilda, Mendoza y San Rafael.
2009: Recibe una medalla del Gobierno de Buenos Aires, entregada a personalidades argentinas, en el marco de los festejos por el bicentenario de la revolución del 25 de mayo de 1810.

Fuente:todo historietas




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Julio Cortázar - Rayuela Cap. 7


Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano, como si por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar, hago nacer cada vez la boca que deseo la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara, una boca elegida entre todas, con soberana libertad elegida por mi para dibujarla con mi mano en tu cara, y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja...

...Me miras, de cerca me miras, cada vez mas de cerca y entonces jugamos al cíclope, nos miramos cada vez mas de cerca y los ojos se agrandan, se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran, respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes, Jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene con un perfume viejo y un silencio. Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos, de fragancia oscura. Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo del aliento, esa instantánea muerte es bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y yo te siento temblar contra mi como una luna en el agua. (fragmento)



Alejandra Pizarnik - Piedra Fundamental

No puedo hablar con mi voz sino con mis voces.

Sus ojos eran la entrada del templo, para mí, que soy errante, que amo y muero. Y hubiese cantado hasta hacerme una con la noche, hasta deshacerme desnuda en la entrada del tiempo.

Un canto que atravieso como un túnel.

Presencias inquietantes, gestos de figuras que se aparecen vivientes por obra de un lenguaje activo que las alude, signos que insinúan terrores insolubles.

Una vibración de los cimientos, un trepidar de los fundamentos, drenan y barrenan, y he sabido dónde se aposenta aquello tan otro que es yo, que espera que me calle para tomar posesión de mí y drenar y barrenar los cimientos, los fundamentos, aquello que me es adverso desde mí, conspira, toma posesión de mi terreno baldío, no, he de hacer algo, no, no he de hacer nada, algo en mí no se abandona a la cascada de cenizas que me arrasa dentro de mí con ella que es yo, conmigo que soy ella y que soy yo, indeciblemente distinta de ella.

En el silencio mismo (no en el mismo silencio) tragar noche, una noche inmensa inmersa en el sigilo de los pasos perdidos.

No puedo hablar para nada decir. Por eso nos perdemos, yo y el poema, en la tentativa inútil de transcribir relaciones ardientes.

¿A dónde la conduce esta escritura? A lo negro, a lo estéril, a lo fragmentado.

Las muñecas desventradas por mis antiguas manos de muñeca, la desilusión al encontrar pura estopa (pura estepa tu memoria): el padre, que tuvo que ser Tiresias, flota en el río. Pero tú, ¿por qué te dejaste asesinar escuchando cuentos de álamos nevados?

Yo quería que mis dedos de muñeca penetraran en las teclas. Yo no quería rozar, como una araña, el teclado. Yo quería hundirme, clavarme, fijarme, petrificarme. Yo quería entrar en el teclado para entrar adentro de la música para tener una patria. Pero la música se movía, se apresuraba. Sólo cuando un refrán reincidía, alentaba en mí la esperanza de que se estableciera algo parecido a una estación de trenes, quiero decir: un punto de partida firme y seguro; un lugar desde el cual partir, desde el lugar, hacia el lugar, en unión y fusión con el lugar. Pero el refrán era demasiado breve, de modo que yo no podía fundar una estación pues no contaba más que con un tren algo salido de los rieles que se contorsionaba y se distorsionaba. Entonces abandoné la música y sus traiciones porque la música estaba más arriba o más abajo, pero no en el centro, en el lugar de la fusión y del encuentro. (Tú que fuiste mi única patria ¿en dónde buscarte? Tal vez en este poema que voy escribiendo.)

Una noche en el circo recobré un lenguaje perdido en el momento que los jinetes con antorchas en la mano galopaban en ronda feroz sobre corceles negros. Ni en mis sueños de dicha existirá un coro de ángeles que suministre algo semejante a los sonidos calientes para mi corazón de los cascos contra las arenas. (Y me dijo: Escribe; porque estas palabras son fieles y verdaderas.)

(Es un hombre o una piedra o un árbol el que va a comenzar el canto...)

Y era un estremecimiento suavemente trepidante (lo digo para aleccionar a la que extravió en mí su musicalidad y trepida con más disonancia que un caballo azuzado por una antorcha en las arenas de un país extranjero).

Estaba abrazada al suelo, diciendo un nombre. Creí que me había muerto y que la muerte era decir un nombre sin cesar.

No es esto, tal vez, lo que quiero decir. Este decir y decirse no es grato. No puedo hablar con mi voz sino con mis voces. También este poema es posible que sea una trampa, un escenario más.

Cuando el barco alternó su ritmo y vaciló en el agua violenta, me erguí como la amazona que domina solamente con sus ojos azules al caballo que se encabrita (¿o fue con sus ojos azules?). El agua verde en mi cara, he de beber de ti hasta que la noche se abra. Nadie puede salvarme pues soy invisible aun para mí que me llamo con tu voz. ¿En dónde estoy? Estoy en un jardín.

Hay un jardín.


Las olas - Virginia Woolf

El sol no había nacido todavía. Hubiera sido imposible distinguir el mar del cielo, excepto por los mil pliegues ligeros de las ondas que le hacían semejarse a una tela arrugada. Poco a poco, a medida que una palidez se extendía por el cielo, una franja sombría separó en el horizonte al cielo del mar, y la inmensa tela gris se rayó con grandes líneas que se movían debajo de su superficie, siguiéndose una a otra persiguiéndose en un ritmo sin fin. Al aproximarse a la orilla, cada una de ellas adquiría forma, se hinchaba y se rompía arrojando sobre la arena un delgado velo de blanca espuma. La ola se detenía para alzarse enseguida nuevamente, suspirando como una criatura dormida cuya respiración va y viene inconscientemente. Poco a poco, la franja oscura del horizonte se aclaró: se hubiera dicho un sedimento depositado en el fondo de una vieja botella, dejando al cristal su transparencia verde. En el fondo, el cielo también se hizo translúcido, cual si el sedimento blanco se hubiera desprendido lo cual si el brazo de una mujer tendida debajo del horizonte hubiera alzado una lámpara, y bandas blancas, amarillas y verdes se alargaron sobre el cielo, igual que las varillas de un abanico. Enseguida la mujer alzó más alto su lámpara y el aire pareció dividirse en fibras, desprenderse de la verde superficie en una palpitación ardiente de fibras amarillas y rojas, como los resplandores humeantes de un fuego de alegría. Poco a poco las fibras se fundieron en un solo fluido, en una sola incandescencia que levantó la pesada cobertura gris del cielo transformándola en un millón de átomos de un azul tierno. La superficie del mar fue adquiriendo gradualmente transparencia y yació ondulando y despidiendo destellos hasta que las franjas oscuras desaparecieron casi totalmente. El brazo que sostenía la lámpara se alzó todavía más, lentamente, se alzó más y más alto, hasta que una inmensa llama se hizo visible: un arco de fuego ardió en el borde del horizonte, y a su alrededor el mar ya no fue sino una sola extensión de oro. La luz golpeó sucesivamente los árboles del jardín iluminando una tras otra las hojas, que se tornaron transparentes. Un pájaro gorjeó muy alto; hubo una pausa: más abajo, otro pájaro repitió su gorjeo. El sol utilizó las paredes de la casa y se apoyó, como la punta de un abanico, sobre una persiana blanca; el dedo del sol marcó sombras azules en el arbusto junto a la ventana del dormitorio. La persiana se estremeció dulcemente. Pero todo en la casa continuó siendo vago e insustancial. Afuera, los pájaros cantaban sus vacías melodías. (fragmento) 1931

Virginia Woolf - Orlando

"Habiendo interrogado al hombre y al pájaro y a los insectos (porque los peces, cuentan los hombres que para oírlos hablar han vivido años su soledad de verdes cavernas, nunca, nunca lo dicen, y tal vez lo saben por eso mismo), habiendo interrogado a todos ellos sin volvernos más sabios, sino más viejos y más fríos -porque ¿no hemos, acaso, implorado el don de aprisionar en un libro algo tan raro y tan extraño, que uno estuviera listo a jurar que era el sentido de la vida?- fuerza es retroceder y decir directamente al lector que espera, todo trémulo, escuchar qué cosa es la vida: ¡ay! no lo sabemos. " (fragmento)

“Cuando los besos saben a alquitrán, cuando las almohadas son de hielo,
cuando el enfermo aprende a blasfemar,
cuando no salen trenes para el
cielo,
a la hora de maldecir,
a la hora de mentir.
Cuando marca sus
cartas el tahúr
y rompe el músico su partitura
y vuelve Nosferatu al
ataúd
y pasa el camión de la basura,
a la hora de crecer,
a la hora
de perder,
cuando ladran los perros del amanecer.”

__

“En la posada del fracaso,
donde no hay consuelo ni ascensor,
el desamparo y la humedad
comparten colchón
y cuando, por la calle,
pasa la vida, como un huracán,
el hombre del traje gris
saca un sucio calendario del
bolsillo y grita
¿quién me ha robado el mes de abril?
¿pero cómo pudo sucederme a mí?
¿quién me ha robado el mes de abril?
Lo guardaba en el cajón
donde guardo el corazón.”

__

“Cuando agoniza la fiesta
todas encuentran pareja
menos Lola
que se va, sin ser besada,
a dormirse como cada
noche sola
y una lágrima salada
con sabor a mermelada
de ternura
moja el suelo de su alcoba
donde un espejo le roba
la hermosura.
Nadie sabe cómo le queman en la boca
tantos besos que no ha dado,
tiene el corazón tan de par en par y tan oxidado.”

__

“Algunas veces vivo, y otras veces
la vida se me va con lo que escribo,
algunas veces busco un adjetivo
inspirado y posesivo que te arañe el corazón.
luego arrojo mi mensaje,
se lo lleva de equipaje
una botella…, al mar de tu incomprensión.
No quiero hacerte chantaje,
sólo quiero regalarte una canción.”

__

“Desnuda se sentía igual que un pez en el agua,
vestirla era peor que amortajarla,
inocente y perversa como un mundo sin dioses,
alegre y repartida como el pan de los pobres.
No quise retenerla, ¿de qué hubiera servido
deshacer las maletas del olvido?
Pero no sé qué diera por tenerla ahora mismo
mirando por encima de mi hombro lo que escribo.
Le di mis noches y mi pan, mi angustia, mi risa,
a cambio de sus besos y su prisa,
con ella descubrí que hay amores eternos
que duran lo que dura un corto invierno.”

__

“No soporta el dolor, le divierte inventar
que vive lejos, en un raro país,
cuando viaja en sueños lo hace sin mí,
cada vez que se aburre de andar, da un salto mortal.
Cuando el sol fatigado se dedica a manchar
de rosa las macetas de mi balcón
juega conmigo al gato y al ratón,
si le pido “quédate un poco más”, se viste y se va.
Cuanto más le doy ella menos me da
Por eso a veces tengo dudas, ¿no será un tal Judas
el que le enseñó a besar?”